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jueves, 5 de junio de 2014

NOTA DE FRANKESTEIN I

Hice a mi sucesor a mi imagen y semejanza, dotándolo de las piezas imprescindibles y coadyuvantes para reinar entre los hombres, superior en fuerza a ellos, pero humildemente idéntico. Cultivé mi parcela de saber y de poder para labrar a mis descendientes de artificio una heredad donde perpetuar con orgullo nuestro linaje exquisito hasta el fin de los tiempos. Soborné a los científicos guardianes de los dones mágicos para insuflar, a aquel mi retoño diseñado a costurones, vida eterna, inteligencia, apostura y valentía. 

Pero al único que pude engañar fue a él mismo: mi pobre criatura esperanzada de humanidad. El pueblo lo aborreció y rechazó con temor por su impostada incertidumbre, clamando libertad a gritos para escapar del yugo que yo había tejido entre uno y otro. Fue cruel que mi corte de aduladores me convenciera de que el fruto de mi creación estaba preparado para ejercer su destino en la vida, y peor aún de que sus naturales súbditos lo acogerían con amor. Cuando lo oí morir gritando entre las llamas de aquel molino cercado por hogueras del populacho, murió también en mí la piedad por los insignificantes intransigentes y deseé que en lugar de haber ahogado a aquella sola niña de la flor en el río, mi monstruo los hubiera destrozado a todos con sus fauces adaptadas de asesino y sus garras extirpadas de ladrón. 


Imagen. http://www.scifinow.co.uk/wp-content/uploads/2012/09/Frankenstein.jpg


2 comentarios:

  1. Béllo en verdad la descripción de lo que realmente somos; Monstruo creado y creador,que no encajan en una comunidad de entes idénticos.
    ¡Felicidades por esta bella entrega!

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  2. Me encantó, realmente muy bueno !!! Un abrazo y cariños

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