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miércoles, 23 de abril de 2014

LA CONDICIONAL LÍNEA 21

"...A los nueve años tendrás que ir tú sola en autobús al colegio, pues tu hermana cambiará de centro. Pero no temas, te vas a desenvolver bien, acabarán por gustarte esos breves viajes en que suceden pequeñas historias y ello formará  parte de tu personalidad: paciente, altamente concentrada en tus reflexiones, algo despistada del mundo que te rodea y buena silbadora, como todos los antiguos buseros."

La voz siguió hablando una parrafada más mientras ella divisaba desde el aire una variada tournée de paradas de transporte urbano de la línea 21. Junto a alguna marquesina se veía a sí misma portar una pirámide escalonada de libros de texto mientras la acompañaba otra niña de lacio pelo amarillento; ambas recibían con  intermitencia proyectiles de papel arrugado de manos de chiquillos agazapados entre los coches aparcados. En otro enclave de la gira pudo sentir el sabor y la emoción electrizante del primer beso, que la sorprendió tanto como un originario  calambrazo en la médula espinal, el cual fue repitiéndose, cada vez con menos fuerza, como un eco apagándose en la memoria que lo recordaba. Un poco más allá, junto a un parque remansado, sufrió el puñetazo que estrenó de verde su ojo izquierdo a manos de unas ladronzuelas porreras que quisieron quitarle su dinero y su inocencia sin conseguir ni uno ni otra.

Despertó en su cama recordando vívidamente todas las imágenes y voces soñadas. Eso la sorprendió, pero más aún le extrañó reconocer que su mente había recreado un pasado condicional, un pasado que no fue el suyo por muy poco, ya que su familia jamás llegó a vivir en el lejano término de la Línea 21, donde la ciudad se acababa al borde de la naturaleza, allá en las afueras, sino en un barrio céntrico. Pero era verdad que a punto estuvieron de hacerlo. 





3 comentarios:

  1. ¿Quien en sueños o en despierto, no viajado a un pasado que nunca fue?
    Lo has plasmado revestido en excelso relato.
    Me ha gustado y lo compertí.

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  2. Miedos inconscientes tal vez..? Buenísimo! Como siempre! Saluditos

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  3. Me gusta! Un final muy inesperado y acertado.
    Lo único que tengo que decir es que la letra es un poco pequeña para quienes estamos todo el día ante una pantalla sin gafas ;-)
    bueno y encima no acierto con las letras del código. A ver si hay suerte con los números.
    Un saludo.

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